jueves, 20 de octubre de 2011

Lo que un hueso

Ahora pesa lo que un hueso de cereza.
Mi vida flota sobre las demás, viajando entre las nubes de un cielo azul radiante. Anestesié al corazón y estoy volando sin la preocupación de poder caer al vacío y morir. Busqué un sentimiento y encontré un alivio.

Notas que aún recuerdo suenan en mis oídos cargadas de grandes recuerdos de un primer amor. Mi sonrisa se implanta en la cara, no la puedo esconder. Mis labios cantan las letras sin poder pararlos, son palabras a veces sin sentido pero es que no hay que escuchar lo que dice, sino lo que no dice.

Leer entre líneas ¿es tan difícil? Para la gente normal sí...

He ahogado mis penas en un vaso de trina de mandarina y he disfrutado bebiéndomelas. Ahora sólo me falta una sonrisa, la tuya quizás, para que me ilumine los escalones que tengo que ir subiendo hasta llegar a mi recompensa.

Pero antes, dormiré plácidamente entre mis sábanas, abrazada a un peluche y soñando con Utopías olvidadas en mi subconsciente. Únete y ayúdame a despertar junto a ti.

2 comentarios:

  1. A veces faise preciso desconectarse e non sentir...
    Trina de mandarina? :D Que rara es! :D
    Bico!

    ResponderEliminar
  2. Vale, admito que me ha descolocado un poco la Trina de mandarina xD

    ResponderEliminar

Mancha de pintura