martes, 8 de marzo de 2011

8 de marzo

Sé que esta foto es del ejército Republicano. Sé que esta mujer formaba parte de las Juventudes Socialistas Unificadas. Pero ¿qué mejor símbolo femenino que el de una mujer que luchó por la libertad del espíritu, la libertad de las personas y los derechos que las mujeres tenían en la República?

Gracias a mi mejor amiga sé que muchos de los derechos que se consiguieron en la República fueron abolidos durante la dictadura, teníamos derecho a voto pero, ¿a quién iban a votar si no era al partido al que votaba su marido? No teníamos personalidad, no se nos permitía tenerla.
Durante la Guerra Civil las mujeres fuimos una más y luchamos en los ejércitos por la libertad, en los hospitales de campo e incluso, dentro de las cárceles, como Matilde Landa, que peleó en la cárcel de Ventas porque las mujeres tuvieran más comida y se las escuchara pudiendo poner una mesa en su celda para que todas hablasen de sus problemas dentro de la cárcel. Julia Conesa (una de las trece rosas) fue encerrada por defender a todas esas mujeres que raparon al cero, a todas aquellas que dieron aceite de ricino y que pasearon por los pueblos para humillarlas.

Éstas, como otras mujeres, pelearon por los derechos que ahora poseemos y que algunos energúmenos aún intentan quitarnos. Somos mujeres, somos fuertes y podemos salir adelante.
Desde aquí doy gracias a todas esas mujeres que eligieron sus ideales y su situación como mujer, antes que la vida. Aquellas que murieron en pos de la libertad del ser humano, de la cultura y no de una religión o de cuatro o cinco acomodados. Doy gracias por la libertad, por poder ir cogida de la mano de la mujer que ame y no tener que esconderme. Gracias por este día. Gracias por la lucha. Gracias por morir por tus derechos, por los míos, por los de todas las mujeres.

Pero no os equivoquéis, hay que seguir luchando como entonces, pues aún hay miles de millones de mujeres que no saben lo que es tener derechos, que no pueden salir a la calle si no es con su marido. Mujeres que mueren lapidadas por cosas que no hicieron, mujeres a las que les provocan la ablación para que no sepan jamás lo que es el placer, mujeres que siguen sin saber lo que es la libertad de elegir o de trabajar por un sueldo. Mujeres que no saben vivir solas...mujeres muertas en vida, que necesitan del resto de nosotras, para poder sobrevivir.

Desde aquí llamo a la lucha unida entre mujeres para ayudar a todas aquellas a las que les han silenciado la voz.

2 comentarios:

  1. Y si...aún nos queda mucho camino por recorrer. Demos gracias a aquellas que lucharon por la igualdad y la libertad, por nuestros derechos. Ellas si eran verdaderas heroínas.

    Saludos.

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  2. Lo eran y como dijo Julia, su nombre jamás será borrado de la historia
    =)

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Mancha de pintura